Espinosa Maldonado de Saavedra y Tello de Guzmán, Miguel. Conde del Águila (II). Sevilla, 1715 – 1784. Anticuario, coleccionista, bibliófilo y numismático.
Alcalde mayor de Sevilla, caballero de Santiago y provincial de la Santa Hermandad, así como caballero veinticuatro de Sevilla. Miguel Espinosa, II conde del Águila, marqués de Paradas y marqués de la Sauceda, era un sujeto versado en antigüedades y bellas artes, siendo uno de los personajes eruditos más importantes de Sevilla, formando parte del círculo cultural reunido por el asistente Pablo de Olavide en los Reales Alcázares de Sevilla.
En 1775 fue elegido miembro de la Sociedad Patriótica Sevillana, llegando a desempeñar la dirección de la misma. Dentro de la institución fue uno de los encargados de modernizar y mejorar la Biblioteca Pública de Sevilla, objetivo que no llegó a culminar.
En su archivo particular, conservado actualmente en el Archivo Histórico Municipal de Sevilla, se guarda la abundante correspondencia mantenida con los principales personajes de la época, como Gregorio Mayans, Pablo de Olavide, Andrés Burriel, Gaspar Melchor de Jovellanos, Francisco de Bruna, Antonio Ponz, Padre Henrique Flórez, Francisco Pérez Bayer, Pedro Rodríguez de Campomanes y otros eruditos y políticos de la época.
Formó una importante biblioteca, compuesta por 4.404 títulos impresos, y para la compra de libros tuvo agentes en Madrid y Lisboa, encargados de la adquisición de libros, no sólo de novedades sino también de ofertas de libreros de segunda mano o de viejo. Así, intentó comprar sin éxito las bibliotecas de Blas Jover, Andrés González de Barcia y de Ascensio de Morales. En el catálogo de libros abundan las obras de libros españoles (52,47 por ciento, incluidas las traducciones), seguidas de las obras francesas (18,59 por ciento) y latinas (18,34 por ciento).
Un hecho que demuestra la importancia de la biblioteca reunida por el conde del Águila es el hecho de que en 1803 la Real Academia de la Historia interesase a su sucesor que le remitiese un Catálogo de los libros impresos y manuscritos, que tratan de las antigüedades del reino de Sevilla existentes en su preciosa y escogida biblioteca, para su inclusión en la Colección Lithológica que había retomado en esos momentos.
Esta biblioteca estaba acompañada por un importante compendio de manuscritos, en los que existían tanto copias de libros antiguos como copias de otros libros que le era imposible encontrar. En esta labor desempeñó un importante papel Manuel Díaz de Ayora, secretario y bibliotecario personal del conde del Águila.
Ante la inexistencia de una biblioteca pública en la Sevilla de la época, su casa fue ampliamente visitada por los miembros de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras, entre los que destacan Leyrens, Trigueros, Cevallos o Martín de Ulloa, quienes consultaron las obras allí existentes para poder redactar sus disertaciones y obras eruditas. Aparte de ello, ayudó al padre Flórez, a Luis José Velázquez de Velasco, a Antonio Ponz y a Francisco Pérez Bayer a la realización de sus obras, transmitiéndoles información sobre hallazgos epigráficos o mediante la entrega de dibujos de las monedas por él reunidas. Igualmente, fue en numerosas ocasiones cicerone de dichos eruditos, a los acompañó en sus visitas a ruinas de la vecina Itálica.
En 1751, el conde del Águila encargó a Pedro San Martín Lara, arquitecto mayor de Sevilla, y al pintor Juan de Espinar que levantasen diversos planos del anfiteatro de Itálica, a los que se acompañaron una memoria acerca del edificio, que fue publicada íntegramente por el padre Flórez en su España sagrada.
En 1753 promovió la realización de excavaciones arqueológicas en el denominado Cerro de los Palacios de Itálica (Santiponce, Sevilla), a consecuencia de las cuales se hallaron sendos pedestales dedicados a los emperadores Caro y Probo, que fueron depositados en el Patio del Apeadero del Monasterio de San Isidoro del Campo.
Reunió también una importante colección numismática, que fue utilizada por el padre Flórez para la edición de sus trabajos sobre las medallas y las monedas de España. Igualmente, fue conocida por Francisco Pérez Bayer, quien dibujó algunas de las monedas prerromanas de la colección.
A la muerte de su heredero, en 1808, la biblioteca reunida se dispersó y el archivo documental fue adquirido por el Ayuntamiento de Sevilla. La importancia de este conjunto es fundamental para conocer la historia de Sevilla desde la Edad Media hasta el siglo xviii.
La figura del II conde del Águila es representativa de uno de los personajes más importantes de la ilustración andaluza. Gozó de un gran renombre entre los principales eruditos de su momento, a pesar de que nunca perteneció a la Real Academia Sevillana de Buenas Letras, institución cultural a la que prestó una gran ayuda. Actualmente, sus trabajos se encuentran dispersos entre la Biblioteca Nacional, la Biblioteca Capitular y Colombina de Sevilla, el Archivo Municipal de Sevilla y la Real Academia de la Historia.
Obras de ~: Correspondencia con el Padre Flórez, 1757 [Real Academia de la Historia (RAH), 9/7567 (II,8)]; Schedae epigraphicae, 1760 [Archivo Municipal de Sevilla (AMS), sec. XI 1(en folio)/2]; Antigüedades Sevillanas, s. f. [AMS, sec. XI 1(en folio)/39]; Índice de libros de la Biblioteca del Conde del Águila, s. f. [Biblioteca Universitaria de Sevilla, 331/199]; Catálogo de manuscritos de la Biblioteca del Conde del Águila, s. f. [Biblioteca Universitaria de Sevilla, 331/198]; Varias noticias sacadas de los manuscritos de la Biblioteca del Sr. Conde del Águila sobre Sevilla s. f. (RAH, 9/5944).
Bibl.: P. San Martín Lara, Noticias que yo Pedro de San Martín y Lara, maestro mayor arquitecto del Ilmo. Cavildo Recinto de la ciudad de Sevilla, doy del Amphiteatro de Itálica, como se ve á el presente según el reconocimiento efectuado por orden de el Conde del Águila, Sevilla, 15 de abril de 1754 [Real Academia de la Historia (mss. 9/7567-I, 38)]; E. Flórez, España Sagrada, t. XII, Madrid, Imprenta José Rodríguez, 1754, págs. 224-226; E. Flórez, Medallas de las Colonias, Municipios y Pueblos antiguos de España, Madrid, Oficina de Antonio Marín, 1757-1773; M. Méndez Bejarano, Diccionario de escritores, maestros y oradores naturales de Sevilla y su actual provincia, t. I, Sevilla, Tipografía Gironés, 1922, págs. 186 y 187; F. Aguilar Piñal, “Fundación de la Sociedad Patriótica de Sevilla”, en Archivo Hispalense, 109 (1961), págs. 187-193; F. Aguilar Piñal, “Más sobre la fundación de la Sociedad Patriótica de Sevilla (fuentes documentales)”, en Archivo Hispalense, 111 (1962); F. Aguilar Piñal, La Sevilla de Olavide (1767-1778), Sevilla, Ayuntamiento, 1965, págs. 175-195; F. Aguilar Piñal, Catálogo de documentos sevillanos que se conservan en el Museo Británico, Sevilla, Ayuntamiento, 1965; F. Aguilar Piñal, “El Conde del Águila, insigne bibliófilo sevillano”, en Temas Sevillanos (primera serie), Sevilla, Universidad, 1972, págs. 59-65; F. Aguilar Piñal, “Una Biblioteca dieciochesca: la sevillana del Conde del Águila”, en Cuadernos Bibliográficos, 37 (1978), págs. 141- 162; F. Aguilar Piñal, “Mayans y el Conde del Águila”, en VV. AA., Mayans y la Ilustración: Simposio Internacional en el Bicentenario de la muerte de Gregorio Mayans, t. III, Valencia, Ayuntamiento de Oliva, 1981, págs. 281-289; A. Mestre Sanchis, Correspondencia de los Ilustrados Andaluces, Sevilla, Junta de Andalucía, 1990 págs. 35-72; P. L eón Alonso, “Las Ruinas de Itálica. Una imágen arqueológica de prestigio”, en J. Beltrán y F. Gascó (ed.), La Antigüedad como Argumento.
Historiografía de Arqueología e Historia Antigua en Andalucía, Sevilla, Junta de Andalucía, 1993, pág. 38; J. M.ª Luzón Nogue, Sevilla la Vieja, Sevilla, Fundación Focus, 1999, págs. 35- 37; M. Illán Martín, “La colección pictórica del Conde del Águila”, en Laboratorio de Arte, 13 (2000), págs. 123-151.
Jesús Salas Álvarez
